Gran tema el de que el celular nos escucha. Semanas atrás estuve en el programa de Felicitas Bonavitta  hablando de tecnología, IA y de todo un poco. Una muy linda charla que pueden ver aquí. También estuve en el programa de María O’Donnell hablando de Meta AI. En ambos casos, surgieron cuestionamientos sobre si Meta AI lee nuestros mensajes y, ya que estamos, si el celular nos escucha.

En las redes, luego, se repite la misma discusión: ¡obvio que nos escuchan! Comentaron: “vos pensás” (yo no pienso, informo en base a fuentes) y “te cuento una anécdota personal”, “a mi me pasó”, etc.

Es un tema complejo pero en primer lugar tiene que ver con el sesgo de confirmación: yo creo esto y lo puedo comprobar en base a mi experiencia personal. ¿Cuánta gente cree esto? Las encuestas sobre este tema muestran que un 43% de los usuarios de celulares lo creen.

Sin ir más lejos, acaba de salir una publicación de Nieman Lab que es más probable que creas en las noticias falsas compartidas por alguien que apenas conocés que por tu mejor amigo. Tiene que ver con la fuerza de los lazos débiles y con el sesgo de confirmación y el sesgo de observación selectivo, entre otros.

¿El teléfono nos escucha? Los expertos afirman que se trata de un mito urbano moderno. Más allá de que técnicamente sea posible, no es viable a gran escala.

Si hablamos en base a fuentes, hay mucha bibliografía sobre el tema y ninguna pudo comprobar esto.

Aquí un experimento de Nord VPM y la explicación

Aquí el experimento de la empresa de ciberseguridad Wandera

Lo que sí está comprobado es que existe la “publicidad conductual” y el marketing dirigido. Cada uno de nosotros tenemos un perfil sobre nuestra actividad en internet que es una mezcla de información que damos voluntariamente y que aporta nuestro celular cuando lo usamos.

 

Un estudio de la Fundación Panoptykon publicado por el Financial Times demuestra cómo Facebook utiliza algoritmos para ofrecer anuncios personalizados que pueden explotar las vulnerabilidades mentales de los usuarios.

Si es cierto que hubo casos de espionaje de audio, como el de Alexa años atrás. Que los celulares tienen la capacidad de escuchar. Y también, de conocer mucho de nosotros por nuestra actividad en línea, por nuestra geolocalización, por nuestras búsquedas en navegadores y por las cookies.

Los gobiernos, también tienen esa capacidad. Por eso son importantísimas las regulaciones y, por eso, en Europa acaban de acusar a META de violar las reglas al ofrecer a sus usuarios dos opciones: “Pago o consentimiento” para elegir si la empresa usa o no sus datos privados para mostrar anuncios personalizados en Facebook e Instagram.

Que nos escuchan, hasta que la justicia demuestre lo contrario, es un mito urbano.

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