Poco se habla de violencia de género digital. Existe y tiene muchas formas no amables de mostrarse. Acaba de publicarse “Avance de los derechos de las mujeres en línea: brechas y oportunidades en investigación y defensa” de #WomensRightsOnline.

Según la World Web Foundation, las mujeres más activas en Internet (blogueras, periodistas y activistas en general) se exponen a un mayor riesgo de sufrir violencia de género en forma de agresiones, comentarios sexistas, amenazas y descalificativos, provocando autocensura o cancelación de sus perfiles en las redes.

Esto se refuerza con el análisis de The Guardian que revela que unos 70 millones de comentarios escritos por mujeres, personas con identidad LGBTQi y judíos, durante 10 años, padecieron acoso en línea en forma regular y consistente.

Como dice el artículo, tan solo cinco años no existía la conciencia de que el acoso online: “El anonimato deshinibe a la gente (…) Las turbas se forman rápidamente: una vez que se publica un comentario abusivo, aparecen otros, a veces compitiendo por ver cuál es el más cruel. El acosado puede llegar a sentir que los acosadores están en todas partes”.

Para combatir este problema, se presentó el nuevo informe “Avance de los derechos de las mujeres en línea: brechas y oportunidades en investigación y defensa”, basado en las auditorías de investigación digital y brecha digital de género de 2016 de Web Foundation, publicado esta semana en su web, con el objetivo de monitorear de manera significativa el progreso hacia el acceso de mujeres a Internet y utilizar.

El análisis #WomensRightsOnline considera los puntos débiles de las políticas existentes, incluido el acceso asequible, universal e incondicional a un uso significativo de la web por parte de mujeres y niñas, que aún deben abordarse para cerrar esta brecha digital de género. También analiza las áreas donde la investigación adicional ayudaría a arrojar luz sobre las políticas e intervenciones necesaria, que incluyen:

• Conocimientos sobre nuevas áreas temáticas como el futuro del trabajo, la inteligencia artificial y la neutralidad de la red, en lo que respecta al acceso y uso de las TIC por parte de las mujeres.
• Una mirada más profunda a los diferentes aspectos del marco REACT, incluida una comprensión más profunda de la violencia de género mediada por tecnología (en la vertiente ‘Derechos’ del marco).

En este link se puede acceder al informe completo presentado esta semana y otros recursos de la fundación.